Naturaleza

Agua, flora y fauna

Naturaleza en la Ribera Alta del Ebro

A nuestra comarca la articula el río que le da nombre, el río Ebro.

Es una amplia llanura de inundación en la que el río avanza creando meandros y recibiendo afluentes como el Jalón o el Arba. Esto genera que la Ribera Alta del Ebro goce de una rica biodiversidad vegetal y faunística. Sin embargo, si nos alejamos de los ríos, el clima continental y los suelos de yesos generan un paisaje de estepa.

Podríamos decir entonces que el agua determina los paisajes de nuestra comarca; con los sotos y ecosistemas acuáticos creados por el sinuoso recorrido del Ebro, las ricas huertas regadas con aguas del Jalón o del Canal Imperial o el paisaje árido de las zonas más secas.

En cuanto al relieve de la zona, vemos que está diferenciado en las dos márgenes del río. La izquierda es mucho más abrupta, algo que se puede ver en El Castellar o en los montes de Castejón. Mientras que el relieve de la margen derecha está formado por terrazas mucho más suaves y continuas.

Sol entre las copas de los árboles y sus hojas
Ovejas pastan en los campos de Alcalá, en la Ribera Alta del Ebro
Flores silvestres en la Ribera Alta del Ebro
Sol sobre el río Ebro y la flora en Luceni

Un entorno natural a orillas de la ciudad

CLIMA

Si hablamos del clima, tendríamos que decir que vemos las características de un clima mediterráneo continentalizado.

Las dos cordilleras que cierran por Norte y Sur la Ribera Alta del Ebro, hacen que destaque por fuertes cambios de temperatura, escasas lluvias, lo que provoca una tendencia a la aridez, y una característica propia de nuestra tierra: la presencia del cierzo. Las temperaturas que pueden llegar desde -10 grados hasta los 40 los días más calurosos de verano.

Podríamos decir que es un clima de marcados contrastes entre estaciones, en relación de un año con otro o incluso en un mismo día.

Todo esto va a determinar la vegetación y frondosidad de nuestros entornos naturales, además de ser decisivo para los cultivos.

FLORA

Hay que destacar la convivencia de lo humano y lo natural. El río Ebro, determinante en la vida de los habitantes de la comarca, también lo es para la flora.

Destaca por encima de los demás los bosque de ribera, donde podemos destacar: tamarices, sauces, álamos, fresnos o chopos. Pero también Pino carrasco o matorrales en zonas más alejadas al río. Además en los brazos ciegos y meandros se genera una vegetación palustre dónde abundan extensos carrizales.

Por otra parte, también hay que mencionar los arbustos, gramíneas, zarzas, cañas, rosales silvestres o diferentes flores.

Toda esta vegetación destaca por su flexibilidad, vitalidad y capacidad de regeneración.

FAUNA

En relación a la fauna hay que mencionar diferentes especies:

Aves como: el búho real, alimoche, cigüeñas, perdices, quebrantahuesos, gavilanes o las garzas. Además de milano negro o águila real, visibles en el castellar, declarado Zona Especial de Protección para las Aves (ZEPA).

Los mamíferos que más pueblan nuestra comarca son los conejos, jabalíes, zorros o jinetas.

En nuestras aguas, habitan peces como la madrilla o barbo, especies autóctonas, u otras especies invasoras como las carpas o siluros. Además cercanos a la orilla de nuestros ríos podemos encontrar anfibios como el sapo común o corredor y reptiles como la culebra viperina o de collar.

La naturaleza no es un ente aparte de las personas en la Ribera alta del Ebro. Los habitantes de esta comarca están presentes en ella y viceversa. Han influenciado las actividades económicas, la agricultura o incluso la historia. Fertiliza huertas y campos a la vez que inunda pueblos en época de crecidas. Podríamos decir que la relación de los ribereños y su naturaleza es de amor-odio, como las grandes leyendas de la vida.